Acaban de dar la noticia, que -aunque esperada- no deja de ser dolorosa: Benedicto XVI, el Papa emérito, ha muerto.

Apenas oída la noticia, una oración al Señor, por este gran hombre que, al ser elegido Papa, se definió como un «humilde trabajador de la viña del Señor».

El primer escrito suyo que me viene a la cabeza, la encíclica «Deus caritas est» (Dios es Amor) y allí él escribe: «Un amor tan grande que pone a Dios contra sí mismo, su amor contra su justicia». Es una frase dramática; una definición de Dios que trae consuelo, gozo y paz el oírla y pensarla ¡Dios es Amor! Lo demostró al darnos a su Hijo encarnado en las entrañas de María (estamos en los días de Navidad… ¡tanto amó dios al mundo que entregó a su Hijo Unigénito! dice S. Juan en su Evangelio).

Esta encíclica la firmó el Papa en el inicio de su Pontificado, 25 de diciembre de 2005. Era, de algún modo, el programa de lo que Benedicto XVI quería enseñar y hacer en los ocho años que estuvo a la cabeza de la Iglesia.

Otros perfiles de su vida, escritos ampliamente, son su docencia y su sabiduría. Y es verdad, su Magisterio es inmenso. Se decía que las multitudes iban a Roma en tiempo de Juan Pablo II «a verlo»; y luego iban en tiempo de Benedicto XVI «a oírlo».

Pero aquí y ahora, interesa recordar dos momentos:

El 17 de diciembre de 2007, día en que firmó el Decreto de virtudes heroicas en el «Venerable» Manuel Lozano Garrido ‘Lolo’; y el 19 de diciembre de 2009, en que firmó el Decreto de un milagro quedaba así paso a la Beatificación.

A principio de 2008 tuve la oportunidad de saludar, en la plaza de San Pedro del Vaticano, al Papa Benedicto, le entregué una carta de gratitud por la primera de estas dos firmas antedichas.

D. Rafael Higueras entrega carta de gratitud al Papa Benedicto XVI (2008).

Pero ahora recuerdo la primera vez que vi a este hombre sabio y santo. Cruzaba yo la plaza de San Pedro, sería a comienzos de 2000. El cardenal Ratzinger cruzaba la misma plaza con su hermano, sacerdote. Me acerqué a él y le ofrecí una estampa de Lolo y la biografía breve; atendió mi encuentro con atención suma. Besó la estampa y la guardó en el bolsillo de su chaqueta.

Luego… 10 años después, siendo ya Benedicto XVI firmó el Decreto de Beatificación que se leyó en Linares, el día 12 de junio de 2010.

¡Gloria a Benedicto!

¡Dios le pague sus trabajos en la viña del Señor!

Rafael Higueras Álamo,
Postulador de la Causa de Canonización
de Manuel Lozano Garrido ‘Lolo’

Os recomendamos el especial BENEDICTO XVI publicado en el sitio web de la Conferencia Episcopal Español: [Ha fallecido Benedicto XVI]

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