Hay formas de decir las cosas y que las mismas tengan, en su seno, una raíz de esperanza que llena el corazón de quien las recibe. Y eso es lo que hace Lolo con este escrito que mira hacia Dios.

Hay formas de decir las cosas y que las mismas tengan, en su seno, una raíz de esperanza que llena el corazón de quien las recibe. Y eso es lo que hace Lolo con este escrito que mira hacia Dios.
Es cierto y verdad que el Mal se manifiesta en el mundo desde que el mismo es lo que es. Pero no podemos negar que hay personas que se oponen al mismo con su buen hacer y su buen proceder.
Resulta, de todo punto, esperanzador, que se pueda poner la realidad bajo las manos y pasión de Cristo. Y es que la única forma de pasar esta pasión nuestra de cada día.
Es cierto y verdad que podemos dirigirnos a Dios para dar gracias por aquello que nos dona y con su gracia nos entrega. Y el médico, seguramente, muchas gracias debe dar por poder cuidar de la vida de su prójimo.
Es cierto y verdad que aquella parte de nuestro cuerpo que son las manos muchas veces no nos parecen tan importantes como, según nos muestra Lolo, lo son. Creación de Dios, también, con nosotros, y expresión de Su Bondad.
Comprender el sufrimiento y saber llevarlo al plano exacto donde le corresponde estar es cierto que está en el poder de aquellos que reconocen su verdadero sentido.
Comprender la Cruz, tenerla como referencia en la vida del discípulo de Cristo, es lo que debe ansiar todo hijo de Dios.
Ciertamente, aunque los tiempos llamados “fuertes”, como la Cuaresma, se han vivido de forma distinta en determinados momentos, no por eso deja de ser importante la misma.
Cuando llega el momento en el que un año termina y el siguiente aún no ha dado sus primeros pasos, siempre es conveniente dirigirse a Dios, que nos escucha, para agradecer; sobre todo, agradecer.
Nuestro amigo Lolo sabe, como hace siempre, trasladar al mundo de hoy lo que tantos siglos se viene celebrando y es la Cruz redentora la que vence.
Escribir sobre una de las manos agujerada por un clavo y que la misma sea de Cristo es una forma de dar gracias a Dios y de poner las cosas en su sitio.
Lo mismo que hace Dios en “Reportajes desde la cumbre”, obra de Lolo, también se dirige a sus hijos-hermanos de...