En ciertas ocasiones, Lolo nos descubre personajes que, como es lógico, no conocemos hoy día porque hace muchos años...

En ciertas ocasiones, Lolo nos descubre personajes que, como es lógico, no conocemos hoy día porque hace muchos años...
Recordar aquellos primeros años de vida de la juventud dentro de la Acción Católica no deja de traer al hoy mismo la importancia que tiene que a tales edades los jóvenes tengan muy claro a Quien seguir.
Lolo en Tíscar; Lolo en el campamento de Acción Católica. Este artículo rebosa alegría espiritual pero también física....
Como periodista de raza que era, Manuel Lozano Garrido entendía y sabía que la radio (en su tiempo tan importe ante lo nuevo de la Televisión) era un medio más que importante para que el Bien tuviera su asiento natural. Y a fe cierta podemos decir que así era según nos dice.
Manuel Lozano Garrido ‘Lolo’ nos explica forma muy sencilla, en el reverso de una entrada para una obra de teatro benéfica, quién es el prójimo y cómo amarlo.
Nada mejor, para Manuel Lozano Garrido, Lolo, que referirse a la montaña con la que tanto gozó a lo largo de su vida por ser lugar de encuentro y, a la vez, de sosiego para su corazón.
Bien podemos decir que la vivencia de aquella Juventud de Acción Católica de Linares en aquellos convulsos tiempos de la constitución de la II República en España fue, como diría Tertuliano muchos siglos antes, semilleros de nuestros cristianos por la sangre derramada.
Es verdad que, como en todo los lugares, también en el pueblo de Lolo había problemas para los que él, sin embargo, veía solución. Y es que no se trata de criticar por criticar sino de aportar lo que uno sabe.
Cuando se está muy a gusto en un sitio y se goza del mismo es de notar que eso se muestra a la perfección en el agradecimiento hacia el mismo. Y Lolo hace eso con “Signo” la revista en la que tanto fue y de la que tanto gozó.
Está más que bien que Manuel Lozano Garrido, aquel joven que escribía a la sección de Cartas al Director de la revista SIGNO tenga tan claro el valor de la misma y la necesidad de su mayor difusión.
Traer a colación una obra tan generosa, educativa y espiritual como la que refiere Lolo en este artículo, muestra hasta qué punto mucho se dio por añadidura al cosechar, luego, el fruto de aquella siembra.
Es cierto y verdad que la Iglesia católica ha de estar, en cuanto a los medios, con los tiempos que corren y Lolo, en el suyo, lo supo conscientemente al hablar de la radio como medio de extensión de la Buena Noticia.