Está más que bien que Lolo converse con personas que, como el P. Javierre dedicaron tu tiempo al estudio de muchos aspectos de la vida de la Iglesia Católica y algunos de sus hijos.

Está más que bien que Lolo converse con personas que, como el P. Javierre dedicaron tu tiempo al estudio de muchos aspectos de la vida de la Iglesia Católica y algunos de sus hijos.
Es muy bueno y mejor que alguien como Manuel Lozano Garrido ataque, por así decirlo, un tema que podría parecer tan banal como es la primera nevada del año. Sin embargo, nuestro amigo es capaz de escribir de tal forma y encarar el tema como lo hace que nos parece la mejor de las noticias.
Como periodista de raza que era, Manuel Lozano Garrido entendía y sabía que la radio (en su tiempo tan importe ante lo nuevo de la Televisión) era un medio más que importante para que el Bien tuviera su asiento natural. Y a fe cierta podemos decir que así era según nos dice.
Apenas tres años después de que se diera luz a la obra “Sinaí” quien fue la persona que llevó a cabo la obra escrita de la revista que lleva el mismo nombre, nos cuenta exactamente cómo fue el origen de todo pero, más que nada, el sentido de algo hecho con el corazón y con el alma.
Cuando se escribe un diario es lógico que se escriba en el mismo aquello que se considera más importante. Lo que hace Lolo en esta semana tan especial retrata muy bien el hacer y el vivir de un santo.
Resulta del todo maravilloso que de una noticia como es, por ejemplo, la aparición de la primera nevada haya alguien que, como Lolo, sea capaz de llevarlo hasta el plano espiritual sin solución de continuidad siquiera…
Está más que bien que Manuel Lozano Garrido entreviste a José María Pérez Lozano pues entre amigos anda la cosa y eso siempre provoca una confianza que puede llevar la entrevista por mejores caminos y más cercanos a la realidad de las cosas.
Es cierto y verdad que no sabemos mucho sobre la vida a lo largo de los años tanto de la Virgen María como de Jesús, ahora niño contemplado por este libro que presenta Lolo pero siempre es bueno tratar de acercarse a eso.
Está más que bien que Manuel Lozano Garrido, aquel joven que escribía a la sección de Cartas al Director de la revista SIGNO tenga tan claro el valor de la misma y la necesidad de su mayor difusión.
El periodista nato que hay en el Beato Lolo lo determina a escribir de su profesión de una forma tan cristiana que no puede evitar, ni quiera, que Cristo lo conduzca todo.
Hay personas que, en su tiempo, pareciera que están adelantadas al mismo y ven venir lo que para otros es, sólo, imaginación y quimera.
El periodista siembra para que otros recojan la cosecha. Aquellos primeros cinco años de la sección sobre Linares fue fructífera y Lolo lo hace ver.