¿Qué dicen del beato Manuel Lozano Garrido?

"Lolo, periodista e inválido, será un santo de nuestros tiempos. Como periodista “entreveía las huellas de Dios en las tele impresoras”, mientras iba dejando olor de santidad. Aunque ciego, no
interrumpió su trabajo de periodista y literato, ni siquiera en los momentos peores de su enfermedad o en los días de mayor dolor."

“De la fragilidad brota la fuerza. Eso nos recuerda Lolo, que fue carne de Cristo y llagas de Cristo, y que no se cruzó de brazos, no tuvo miedo, y a pesar de la adversidad, vivió el periodismo y lo vivió en cristiano.”

"En el beato Manuel Lozano Garrido, el amor a la Eucaristía era un amor sólido, lo alimentó siempre. Este amor, junto a su amor a la Santísima Virgen, tenían una fuerza especial en su experiencia cristiana"

"Mis fervientes deseos de que la figura de Lolo "periodista cristiano", que ha sabido llevar la cruz del dolor con alegría contagiosa, sea faro luminoso para tantos profesionales que trabajan en los Medios de Comunicación Social."

“La figura de Lolo es, especialmente para los comunicadores, un modelo y un virtuoso ejemplo de saber testimoniar con alegría el Don de la Vida, aún en situaciones de prueba con las que convivimos a diario” [ver vídeo]

"Manuel Lozano Garrido -Lolo- fue un santo, un auténtico apóstol en todas las circunstancias por las que discurrió su vida.
Dios le fue llamando, en edades y momentos concretos, para ser su testigo y lo fue podando con cariño y lentamente para que diera muchos frutos y que sus frutos perduraran."

"Lolo veía y comprendía las miles de presencias benéficas de la divina Providencia en su vida personal y en la historia de la humanidad. Por esto, su existencia no estuvo marcada por la tristeza, sino por la alegría; no por el llanto sino por la iniciativa apostólica; no por la soledad sino por la comunicación y la amistad con todos, grandes y pequeños, sanos y enfermos, pobres y ricos. La suya fue una existencia de auténtica santidad evangélica."

«Lolo es un claro ejemplo de lo que debe ser cualquier profesional del periodismo y la comunicación social: ser fiel a la verdad, tener un relevante sentido ético y hacer el bien sin mirar a quién. Todo ello, unido a la ilusión y a una pasión vocacional de servicio público.»

"Lolo fue un periodista que elevó las virtudes de la profesión en cuanto a la verdad, el rigor y la calidad de la palabra. Es necesario elevar la figura de un periodista humano y comprometido."

«Lolo es un Santo, Lolo es nuestro guía, Lolo es el que nos tiene que guiar a todos los periodistas, católicos y no católicos, a hacer nuestra labor de noticia, de información durante todas las jornadas. Para nosotros, para mi particularmente, Lolo es mi maestro y mi guía todos los días.
Todos los periodistas que van a estudiar a las facultades católicas, deben conocer y encarnar las virtudes de Lolo en la labor diaria que hacemos, porque lo difícil de nuestra profesión es la constancia, trabajando con los principios que nos enseñó.»

«Lolo dio un testimonio de vida como pocos, es un beato reciente, reconocido desde la humildad, sin grandes artificios a su alrededor, en condiciones en las que muchos se rendirían, él se convierte en defensor de la verdad. Y esa verdad es en la que tenemos que incidir los periodistas católicos porque ese es el camino de nuestro trabajo.»

Lolo invitaba a los periodistas a «abrir pasmosamente sus ojos» y les ponía en la tarea de ganarse la fe de los lectores a base de «objetividad, esfuerzo, palpitación y espíritu veraz»

"El beato Manuel Lozano Garrido puede aportar un ejemplo de dedicación, de entrega, de profesionalidad, de integridad, de humildad y de amor, de un gran amor… Lolo era un “obrero” del periodismo. Construía, día a día, con amor, una obra periodística de santidad."

"Un periodista que ha sido capaz de seguir los acontecimientos de medio siglo sentado en una silla de ruedas, es un periodista que ha comprendido lo más profundo de la realidad, más allá del quién, del dónde, del cuándo,... ha entendido el porqué.
Lolo es un profeta para cualquier periodista y, sobre todo, para los periodistas católicos."

"Lolo es nuestro maestro"

"Es un modelo ético para este gremio de los “plumillas”, tan necesitado de buenos ejemplos"

«Lolo es un claro ejemplo de lo que debe ser cualquier profesional de la comunicación social hoy en día: fiel a la verdad, con un fuerte sentido ético y con esa alegría y a la vez esa responsabilidad que supone anunciar el Evangelio.»

"En el estilo de Lolo están muchas de las características que se le demandan a cualquier periodista: la verdad por delante, aunque duela, pero dicha sin herir; la honestidad al tratar los temas; una narración poderosa, una calidad literaria de las que enganchan; precisión en el lenguaje; documentación, referencias (...) El beato Lolo puede echarnos una mano para no olvidar esos mínimos. También me quedo con su humanidad."

"Lolo, da gloria a Linares, a la diócesis jiennense y a los periodistas y escritores de la provincia de Jaén, que repetidamente en muchos casos lo consideran como un patrón, como un abogado de la profesión periodística que el defendió con un estupendo decálogo del periodista que puede asumir cualquier profesional comprometido con la verdad."

"Me pregunto si hoy Lolo sería un bloguero o más bien un tuitero, si escribiría tuits breves, con mucha enjundia, como dardos al corazón. Tenía una cierta precisión en la prosa, y una nitidez, una luminosidad, que quizá necesitamos en nuestra época acelerada y un poco histérica."

"Lolo es discípulo y misionero, capaz de transformar la dificultad en fuente de esperanza, la oscuridad en luz. Lolo es todo lo que le falta al mundo de hoy."

Recibiendo el Premio Lolo de Periodismo Joven he sido invitado a cuidar mi vocación como periodista para vivirlo tal y como lo vivía Lolo, como una misión al servicio de la Iglesia y de la sociedad en búsqueda de la verdad.
«Lolo representa para mí el “ser” periodistas frente al “hacer”».

"Creo que el ejemplo de Lolo es hoy una auténtica luz y guía en esta profesión. Lamentablemente el Periodismo vive hoy una crisis profunda. (...) Lolo enseña que el Periodismo es servicio, al hombre, a la Verdad."

"Manuel Lozano Garrido, testigo de su época y ejemplo de creatividad aún atenazado por la enfermedad, estaba animado por la vivencia de la fe. No se entiende de otro modo el milagro de su existencia, la paradoja de su andante inmovilidad, de su dolor alborozado.
Lolo supo descubrir que el dolor, tocado por la fe, rezuma amor en abundancia."

"Lolo nos demuestra que se puede ser periodista y santo a la vez. Y que, de esta profesión, podemos hacer verdaderamente un camino de Santidad"

"Tenemos mucho que aprender del beato Lolo, sobre todo de su mirada cristiana sobre la realidad. Poder contar la realidad desde esa perspectiva puede aportar mucha riqueza a una sociedad como la nuestra, que vive cada día más al margen de la fe.
¡Necesitamos no olvidar que llevamos un tesoro en vasijas de barro! Creo que Lolo era muy consciente de ello y por eso fundó la obra pía SINAÍ: Grupos de oración por la prensa"

"Lolo es un ejemplo de resiliencia y superación. En circunstancias muy adversas, seguir, mantener el paso, la labor y la misión"

"A Lolo no se le acaba de conocer ni de amar nunca. En él tenemos un santo de nuestro tiempo, alguien en quien mirarnos para interpretar, desde la confiada lucha de cada día, esta vida que a veces nos pasa por encima sin pedir permiso."

"Lolo representa la esencia del periodista que huye del protagonismo, porque la eficacia y el éxito, medido según el Evangelio, tiene otros parámetros. Incomprendidos para muchos, pero con una eficacia que trasciende."

"Lolo es referente para todos los periodistas, sin duda, encarna valores sustanciales para la profesión: la generosidad, la honestidad, el compromiso con la verdad, la moral, la ética, la intelectualidad, todo aquello a lo que debemos aspirar cualquiera de los que nos dedicamos a este extraordinario oficio. Es un referente para los periodistas de hoy, pero también para las generaciones futuras de periodistas"

"Lo religioso para Lolo no es un destello ocasional o una chispa transistoria, es el trasfondo continuado y constante de un alma que está en ebullición de amor y esperanza."

"Al lado de su sillón de ruedas, yo veía a Lolo como un profeta del Concilio"

«Fue un devoto de la eucaristía, periodista valiente y comprometido, cercano a los jóvenes. Periodista cristiano, porque escribe muchas cosas de Dios, pero también porque escribe mucho de lo que el Evangelio nos pide hacer a los cristianos»

"Lo más destacable de la vida de Lolo es su Alegría, continua y contagiosa"

"Desde la primera vez que me llevaron a casa de Lolo, hablé con él y parecía que me conocía de toda la vida. A partir de ese momento, Yo tenía NECESIDAD de ir a hablar con él ¡Lolo enganchaba! era algo especial."

«El beato Lolo fue un pionero del «buen decir y comunicar» desde su máquina de escribir y desde su silla de ruedas, desde su ilusión y su dolor, desde su amor a los más débiles y necesitados.»
«Andalucía no puede olvidar a este periodista que ya está en los altares, ni sus escritos y mensajes, ni su estilo de vida, marcado por el dolor y por su generosa entrega a un periodismo humano, fraterno, centrado en las grandes necesidades de la sociedad de su tiempo. La clausura del centenario de su nacimiento y de su bautismo no es, ni mucho menos, un punto final, sino todo un camino radiante de luz y de esperanza para el apasionante mundo de la comunicación.»

"Lolo es un ascua de Dios. El dio un poco de su llama, como decía 'si no ardemos, no valemos para nada'. Es un referente para cualquier cristiano que se acerque a él."

«De Lolo, aprendemos que el dolor y el sufrimiento pueden ser llevaderos. Pero también tenemos que saber que, ese dolor y sufrimiento, conviven con gran parte de la humanidad, con la destrucción de la naturaleza, de la Casa Común»

"Quién quiera que iba a Lolo, y no lo conocía, pensaba que iba a visitar a un enfermo y allí, cuando entrabas, te dabas cuenta que el enfermo eras tú, Lolo era el que te cuidaba, te sanaba, te daba alegría. Y ese es el milagro de Lolo: transformar el dolor en alegría."

"La vida de Lolo es un referencial de cómo vivir, un cristiano cualquiera, su fe cristiana en un mundo muy difícil, como el nuestro. Lolo es un motivo de Esperanza para mucha gente."